Para un constructor de todoterrenos con carácter extremo, hemos colaborado con la sociedad de Ingeniería encargada del desarrollo del vehículo y hemos diseñado un sistema de suspensión con eje rígido, además del tirante de dirección.
En la suspensión con eje rígido las ruedas del mismo eje están conectadas entre sí de manera rígida a través de un elemento transversal con función portadora. Es un sistema especialmente fuerte, fiable, ideal para el transporte de cargas pesadas. Esta suspensión es la característica principal de los verdaderos todoterrenos, los más extremos que tienen alma adventurera para afrontar el “offroad” sin dificultad.
El desafío para FRAP ha sido diseñar un sistema de suspensión con puntales estabilizadores que aguantasen cargas elevadas a pesar de fuertes ángulos cónicos y necesarios a la estructura del axial.
Altas cargas no son nada compatibles con ángulos cónicos. Por esto, ha sido muy importante el estudio sobre los materiales a emplearse y sobre su estructura: en concreto, las características mecánicas de los materiales, junto al momento de inercia de la sección del puntal, han sido los verdaderos protagonistas de este proyecto.
El ánalisis FEA, hecho a través de la simulación al ordenador del comportamiento de los puntales bajo máxima carga y de la simulación de los ciclos de fatiga, ha permitido la validación de la fase del proyecto relacionada con los materiales y la estructura.
Por último, las pruebas internas han confirmado todo el proyecto, en el pleno respeto de los parámetros de desgaste de los componentes, tras los ciclos de vida configurados para el producto.
También el proyecto del tirante ha sido un verdadero desafío: ha sido necesario calcular atentamente la rigidez de la barra de dirección para preservar la caja de dirección en caso de golpes, en detrimento de la rótula de dirección. El cliente, de hecho, había pedido mucha atención a todos los eventos que pudiesen involucrar su todoterreno, privilegiando la protección de los elementos más complejos, y pidiendo la deformación de los componentes más fáciles de ser reemplazados. Hará falta hacer mantenimiento y reparación de este vehículo en cualquier rincón perdido del planeta: y el proyecto tiene que tenerlo bien en cuenta.
Esta necesidad nos ha requerido trabajar con precisión en la rigidez del tirante en caso de golpes: ni demasiado elevada, para no deformar la caja de dirección, ni demasiado baja para respetar los estrictos requisitos de seguridad necesarios.
También en este caso, la simulación FEM ha contribuido de manera relevante al proyecto, y al final las pruebas en banco han confirmado la solución escogida.
El cliente ha conseguido lo que se esperaba, en pleno respeto de los tiempos acordados y de los estándares de seguridad, fundamentales para un vehículo que tendrá que cruzar con éxito las zonas más inaccesibles del planeta.